Costa Rica 2012: conclusiones y consejos

Desde siempre había tenido unas ganas tremendas de viajar a Costa Rica, un país que prometía selva, animales salvajes, volcanes, playas… y realmente una vez visitado debo decir que me parece un destino turístico increíble, apto para aventureros solitarios, para parejas de luna de miel o para familias con niños, tiene de todo y para todos.

Elegir una sola zona de Costa Rica es complicado, es curioso que en un país tan pequeño nos hayan quedado tantas cosas en el tintero, dejamos pendiente una visita a Corcovado, a Rincón de la Vieja, al Irazú… mucho por descubrir si algún día se presenta la ocasión.

Entre lo visitado, cada lugar tiene algo especial. Tortuguero es imborrable, la salida en barca por sus canales al atardecer sin duda quedará grabada para siempre en mi mente, su vegetación inmensa, su fauna, su humedad… Del Caribe sur sin duda recomendable el Parque Nacional Cahuita, fue donde más de cerca tuvimos a los animales, poder darse un baño en una pequeña cala sin nadie alrededor, rodeado de palmeras, monos, mapaches… alucinante. En la Fortuna además de las termas, me quedo con el rafting en el río Balsa, una experiencia inolvidable. En Monteverde, a pesar de sus carreteras, la espesura inmensa de su bosque
nuboso se queda clavada en la retina. En Manuel Antonio me quedo con sus playas, con los eternos paseos junto al mar, con sus atardeceres de película y sus dulces noches con sabor a ron.

En definitiva, un lugar recomendable, para ir con los sentidos al 100 % y dejarse llevar.

 En cuanto a la compañía hay que decir que tantos viajes juntos han conseguido que finalmente Mikel y yo hayamos encontrado el punto de equilibrio, hemos aprendido a saber cuales deben ser nuestros ritmos y en que momentos dedicarnos a nuestros propios espacios, y eso ha redundado en 15 días de perfecta armonía y muchas, muchas sonrisas.

Para terminar, como no, algunos consejos generales y específicos de cada sitio y generales, que nunca vienen mal.

Antes de llegar: Revisa que tengas toda tu documentación en regla, lleva siempre algo de dinero en efectivo, una copia del pasaporte para poder identificarte en caso de robo y una tarjeta de crédito extra que puedas guardar en el hotel a buen recaudo por si a caso. Yo aconsejo tener un seguro de viaje, en nuestro caso lo contratamos directamente con Iberia que es con quien viajamos, siempre es mejor prevenir que lamentar.

Sal de casa ya con el repelente de mosquitos en la mano y toma costumbre de ponértelo cada 3 o 4 horas desde el aterrizaje.

El transporte: Costa Rica es un país pequeño, pero las distancias llevan a engaño debido a lo complicado de su clima y de sus carreteras. Las zonas turísticas suelen disponer de aeropuertos a los que se llega en pequeños aviones, y también se puede contratar traslados en autobús, aunque mi recomendación personal es alquilar un 4x4 para sacarles todo el jugo al viaje.

Como ya he dicho, las distancias engañan, la velocidad media en Costa Rica sueles estar entre los 50 y los 60 kilómetros hora, aunque hay tramos rápidos como la carretera que va a Manuel Antonio y tramos de auténtica tortura (20 – 25 km/h) como el camino a Monteverde. Conducir en Costa Rica es toda una experiencia, sus enormes socavones, sus puentes de un solo carril, zonas de desprendimientos, los ciclistas caribeños, los camiones o el cruce de animales por la carretera (si es que la hay) te hacen estar con mil ojos, pero sigo pensando que siendo prudente, es sin duda la mejor manera de recorrer el país y llegar a cualquiera de sus rincones.

Mención especial tiene el tema de los controles de velocidad, la policía se esconde tras cualquier rincón, no merece la pena correr por ahorrar 5 minutos, si te pasas, te cazan.

En cuanto a los taxis, son bastante seguros y legales, pero no son necesarios sino en San José y el aeropuerto.

Para dormir: Sin lugar a dudas Costa Rica es un país con una importantísimo sector turístico, y gracias a ello es posible encontrar alojamientos dignos en casi cualquier rincón del país, por recóndito que sea. La oferta suele ser muy variada y se distinguen principalmente 3 tipos de alojamientos, hoteles (incluso muchos de lujo, aunque nada que ver con los resort de zonas como Riviera Maya o Punta Cana), hostels y cabinas o cabañas. Nuestra experiencia ha sido muy positiva combinando todas las opciones posibles, desde habitación compartida en albergue mochilero hasta hotel de 5 estrellas.

Mi consejo es que en San José se pernocte en hotel, y en Tortuguero optar por alguno de sus modestos aunque magníficos resort, en el resto del país cada cual que elija, mi opinión es que si quieres ir por libre los hostels tienen magníficas habitaciones privadas y que las cabañas te permiten una independencia total, en cualquier caso aconsejo informarse antes de ir a cada zona y si se viaja en temporada alta reservar con antelación.

El clima: El clima de Costa Rica es tropical lluvioso, esto es, una estación seca, en la que también suele llover, y otra de lluvias en la que a partir del atardecer tienes la lluvia asegurada el 95% de los días. Además de las lluvias se debe tener en cuenta la humedad y el calor. Asumiendo el hecho de que va a llover, la mejor forma de disfrutar de Costa Rica es madrugando, ya que por la mañana el tiempo suele ser mucho mejor, intenta planificar tus actividades lo más temprano que puedas y tendrás muchas más garantías de poder realizarlas.

A pesar de viajar en época de lluvias, nosotros no tuvimos mala suerte con el tiempo, en Cahuita si que pasamos un día y medio bajo la lluvia por la tormenta tropical, pero aún así encontramos actividades para no estar sin hacer nada.

Seguridad: Costa Rica, en comparación con el resto de países de Centroamérica, es un país seguro. Esto no quita que, en zonas turísticas y en temporada alta, los robos estén a la orden del día. Es muy raro que se den episodios de robos con violencia a extranjeros, sino que lo que se debe es tener cuidado con las sustracciones. En líneas generales, manteniendo las precauciones normales de cualquier lugar no debería tenerse ningún problema, no dejes la mochila o bolso sin vigilancia, no dejes cosas de valor en el coche y en los hoteles guarda las cosas de valor en cajas de seguridad. En nuestro caso en particular la sensación de seguridad fue total y absoluta.

Excursiones: Costa Rica se encuentra repleto de Parques Nacionales y Reservas, por lo tanto la mayoría de las salidas suelen ser a realizar rutas de senderismo, observación de animales, etc. En todos los parques se puede contratar guías aunque con excepción de Tortuguero, donde si que es recomendable tener contratada una excursión por los canales, es totalmente factible disfrutar de la naturaleza por tu cuenta. Normalmente en los parques se abona una entrada de unos 10 $ y se dispone de planos e indicaciones claras.

Sin entrar en los deportes de aventura, merece la pena sin duda visitar unas termas en La Fortuna y el santuario del perezoso en Cahuita. También se suele disponer de canarios, serpentarios, jardines de orquídeas, etc. en muchos puntos del país.

Deportes de aventura: Sin duda uno de los puntos fuertes de viajar a Costa Rica es que te permite disfrutar de numerosas opciones para disfrutar de los deportes de aventura. Prácticamente en cualquier alojamiento se pueden contratar las actividades, por lo que es muy fácil pedir consejo. Los puntos fuertes sin lugar a dudas son el canopy, que consiste en moverte entre las copas de los árboles mediante tirolinas y que se puede practicar en cualquier zona del país (aunque en mi opinión el más espectacular es el de Monteverde) y el rafting, ya que Costa Rica es un auténtico paraíso de ríos de aguas blancas, el Pacuaré, el Reventazón, el Naranjo, el río Balsa… desde lugares para iniciarse hasta zonas para expertos, no hay que marcharse sin probarlo.

Además del canopy y el rafting, se puede realizar descenso de cañones, kayac de río y de mar, buceo (dependiendo de las lluvias) y mucho senderismo.

Gastronomía: prepárense para amar u odiar el arroz con frijoles… jejeje. La cocina costarricense se basa en platos contundentes compuestos de arroz, frijoles, plátano frito o en patacones y alguna carne para acompañar. Fuera de este plato, que es el casado, se disfruta de muy buenos pescados, hay buenos ceviches, como pescado se suele consumir corvina y para paladares más exquisitos se recomienda el pargo rojo. También hay buena oferta de langostinos o camarones (muy buenos empanizados), y la langosta es común en la zona caribeña. Por norma general se suele disfrutar de un maravilloso pollo frito y sin lugar a dudas hay que disfrutar de sus maravillosas frutas, batidos, zumos y licuados, la piña es maravillosa, pero también el mango, la papaya, la guanábana…

En el apartado de comida rápida hay bastantes locales con comida tex mex, pizzas… así que quien sea “especialito” comiendo no va a tener problemas.

En cuanto a las bebidas, lo más refrescante es beber limonada o cerveza (imperial por norma general), por las mañanas el café es imprescindible, con las comidas excepto en algunos restaurantes es difícil encontrar un vino aceptable, y en casi cualquier lugar uno se puede tomar unas deliciosas piñas coladas, eso sí, son muy amigos de cargar bastante de alcohol los cócteles.

Mención especial merece su salsa nacional, la salsa Lizano, que es una salsa de difícil descripción y que sirve para acompañar casi cualquier cosa, si os gusta no dudéis en comprar porque yo traje un bote y aquí de momento me ha sido imposible encontrar en ningún sitio.

Compras: Costa Rica no es precisamente un destino en el que las compras tomen un gran protagonismo, pero si que hay ciertos productos que se hacen imprescindibles. El café, de la zona de Monteverde a ser posible, se dispone de todas las maneras conocidas, en grano, molido, tostado al sol, con tueste oscuro… imprescindible llevarse un par de paquetes como mínimo.

En el apartado de artesanías son espectaculares sus máscaras de madera, no son nada baratas pero si te gustan este tipo de artesanías no puedes irte sin una, por lo demás es habitual encontrar buenos trabajos en madera por todo el país, así como trabajos con resina realmente alucinantes.

También se puede encontrar buen ron, y si te gusta está bien traerse salsa Lizano, ya que aquí es imposible encontrar.

Propinas: Es muy habitual dejar propinas, ya que la mayoría del turismo procede de USA. En los restaurantes suelen incluirlo en la factura, y en el resto de ocasiones pues a ojo de cada cual, la verdad es que tenemos fama de rácanos, pero es la falta de costumbre.

Las gentes: son gente muy educada y siempre dispuesta a echarte una mano en todo lo que puedan, a pesar de que es un país invadido por los turistas, es muy raro que intenten aprovecharse de ti, que hay algún caso, aunque no es para nada la tónica habitual.

Imprescindible en Tortuguero: realizar una navegación por los canales al amanecer

Imprescindible en Cahuita: pasear por su Parque Nacional, el que más nos gustó de Costa Rica.

Imprescindible en La Fortuna: relajarse en unas termas de aguas volcánicas.

Imprescindible en Monteverde: hacer canopy en su bosque nuboso.

Imprescindible en Manuel Antonio: protector solar para ir a playa espadilla.

Imprescindible en Poás: madrugar, y comprar unas fresas el cualquiera de los puestos de las laderas del volcán.

Imprescindible en San José: no planificar muchas noches, no merece la pena, si se olvida algún recuerdo visitar la Casona.

Imprescindible en Costa Rica: el repelente de mosquitos, vayas donde vayas

Pura vida!!!