lunes, 24 de septiembre de 2012

Argentina - Uruguay 2011: retorno a Tandil...

Y una vez más aquí estamos, en el aeropuerto de Loiu tomando un cafecito con Endika, que además de no venir con nosotros en este viaje tiene que soportar sobre sus hombros la dura despedida. A pesar de ser 11 de septiembre para nosotros es un día tan bueno como cualquier otro para volar, de hecho incluso mas barato. Nos espera una hora de avión hasta Madrid y después 12 horas hasta Buenos Aires, como no,  con nuestro habitual desayuno en Mc Donalds, ya saben, está prohibido cruzar el charco sin haber ingerido una buena dosis de grasas saturadas.
Esta vez sin ninguna incidencia en los aeropuertos, he de decir que a pesar de haber reservado los asientos supuestamente en salida de emergencia parece ser que los asientos reservados Internet no cuadran con los reales, y llevamos lo mejor que podemos el no poder estirar las piernas a no ser que nos levantemos.

A las 19:30 hora argentina tomamos tierra en Ezeiza, tras recoger nuestros equipajes (siempre los últimos, como no) y sacar dinero en el cajero automático, nos disponemos a tomar un taxi que parezca fiable para ir a cenar algo antes de ir a Retiro a tomar el bus que nos lleve a Tandil. Tras montar en el taxi, vemos que es un remís pero no le damos más importancia, le indicamos que nos lleve a avenida Corrientes, cerca del obelisco, ya que sabemos que es una buena zona para cenar algo económico, a la hora de cobrar la carrera nos sale 220 pesos (casi 40 euros) a pesar de ser algo caro pagamos con 300 en 3 billetes de 100 y en un segundo el conductor nos muestra los billetes y nos dice que le hemos dado 120 (uno de 100 y dos de 10) entre el cansancio y el momento de desconcierto caemos en la trampa del remisero y terminamos pagando otros 100, vamos, que nos han robado 200 pesos prácticamente a la cara. Ya comenté en el post de

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Argentina - Uruguay 2011: Los preparativos

Tras la gran aventura que supuso nuestro viaje a tierras argentinas en 2009, hice la promesa de volver 2 años después, habían quedado atrás demasiados lugares por recorrer y demasiados buenos amigos como para posponer más el retorno a un país que me enamora. Habrá quien piense que era mejor haber tomado nuevos destinos pero las cosas hay que hacerlas cuando se puede (sobre todo económicamente) y apetece.

En principio la idea de este viaje era conocer el norte del país, tras haber conocido la Patagonia dos años antes, comenzando por Mendoza y el impresionante Aconcagua hasta llegar a la quebrada de Humahuaca, luego repetir la experiencia de Iguazú y conocer Montevideo, capital del Uruguay o, como ellos le llaman, el paisito, sin olvidarnos de las obligadas visitas a Tandil, La Plata o Buenos Aires.

Debo reconocer que el plan de viaje cambió muchas veces y que los problemas reales llegaron con las fechas, el hecho de que en el trabajo me obligasen a tomarme las vacaciones en verano truncó nuestras ganas de ir al Aconcagua y modificó significativamente nuestro planning, aunque en el fondo una de las cosas maravillosas de viajar es el dejar siempre algo nuevo que conocer, por si en el futuro se da la oportunidad.

El compañero de viaje, Mikel, infatigable escudero y que comparte el saber mirar con ojos de niño, el saber

martes, 18 de septiembre de 2012

Bosque pintado de Oma

Naturaleza y arte, todo en una misma excursión no  es algo incompatible si tomamos como destino el bosque pintado de Oma. Una buena forma de pasar una mañana en Bizkaia es dirigirse a este peculiar espacio creado por Agustín Ibarrola.

Señalizaciones
La excursión toma como punto de partida el barrio de Basondo, en el término municipal de Kortezubi, junto al restaurante Lezika existe un amplio parking donde está situada también la cueva de Santimamiñe, en la que se puede realizar una visita virtual.

Desde el restaurante tomamos la pista de grava y tierra que nos lleva entre pinares hasta el bosque de Oma. Por el camino encontraremos señalización clara por lo que resulta imposible perderse, desde Basondo se llega en aproximadamente 45 minutos y es un camino sin mayores complicaciones.

Una vez en el bosque pintado lo que toca es disfrutar sin prisas, lo principal es llevarse desde casa el plano

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Santuario de Urkiola y Urkiolagirre

Santuario de Urkiola
De entre la múltiples opciones que existen en Bizkaia para realizar excursiones, visitar el Parque Natural de Urkiola es sin duda una de las más apetecibles. Planeando una mañana de monte sin extremada dificultad, y en nuestro caso con perro, optamos por subir al Urkiolagirre, apacible cumbre de la sierra de Anboto situada a 1011 msnm, tomando como punto de partida el santuario de Urkiola.

El santuario de los Santos Antonios Abad y de Padua de Urkiola es un templo católico que se ubica en el collado y puerto de Urkiola, en el municipio de Abadiño y es uno de los santuarios más venerados de la provincia y de los más antiguos. Junto a él disponemos de bastantes plazas de aparcamiento por lo que es un buen lugar para comenzar una mañana de excursión.

Tximistarri

Nada más llegar, en el exterior del santuario, se encuentra una roca denominada Tximistarri (el meteorito), del que dice la tradición que si se da tres vueltas alrededor mientras se reza a san Antonio se encuentra pareja.

El santuario se erigió en el siglo XX sobre el lugar que ocupaba la antigua iglesia del siglo XVII, construida a su vez sobre una ermita del siglo VIII. Es de admirar su campanario, y ya en el interior, aunque resulta mucho más pequeño de lo que parece desde fuera, se pueden observar sus imágenes vidrieras y mosaicos; en nuestro caso, cuando acudimos se estaba celebrando misa, por lo que

lunes, 10 de septiembre de 2012

Escapadas: Burdeos, la vie en rose

Encontrar un sitio al que escaparse y desconectar inmediatamente de la realidad cotidiana es algo importante para mantener la cordura, para mí, ese lugar en el que respirar un par de días para cargar las pilas, es Burdeos.

Burdeos está a poco más de 3 horas y media de casa en coche y es una ciudad que me enganchó totalmente la primera vez que estuve allí, por lo tanto, lo hace un destino más que apetecible para pasar un fin de semana de desconexión siempre que se presta la ocasión.

Existen numerosas opciones para disfrutar de Burdeos y sus alrededores, visitas a bodegas, museos, la Dune de Pyla y, como no, la propia ciudad de Burdeos, patrimonio de la humanidad. Para un solo fin de semana yo recomiendo disfrutar de la ciudad y la Dune de Pyla, y ya si se tiene algún día más, se pueden visitar viñedos y bodegas si se es un amante del buen vino.

Pues bien, con la idea de salir de la rutina y evadirnos un poco de lo cotidiano planificamos una escapadita a esta ciudad a finales de agosto, aprovechando que el 24 de agosto tengo fiesta y podemos aprovechar un fin de semana de 3 días. En esta fecha hay que tener en cuenta que el tráfico en los pasos fronterizos y en Francia en general es muy intenso, por lo que es probable que nos encontremos con algún atasco.

Ya que los check in en Francia suelen ser bastante tarde (en nuestro caso a las 16:30), no hace falta tampoco pegarse un gran madrugón. La idea es salir sobre las 10 de la mañana para llegar a la 1 a la duna

jueves, 6 de septiembre de 2012

Argentina 2009: conclusiones y consejos

Cuando uno vuelve de un viaje, normalmente de un sitio que no conocía, siempre trae consigo la impresión de que ha sido el mejor viaje de su vida, puede que por lo innovador, puede que por el placer de aterrizar y poder contar la experiencia vivida. En mi caso, sin duda, al menos hasta el momento, este viaje a Argentina es el viaje que más me ha calado. Conocer el sur del continente americano me abrió un mundo de paisajes, sabores, olores, contrastes, sonrisas… que hicieron que me replanteara muchas cosas, sobre todo respecto a mi relación con respecto a esta madre tierra a la que tan poco y mal cuidamos, pero también con respecto a como vivo y a como quiero aprovechar cada momento.

Argentina es un país enorme y que ofrece muchas más opciones que las que nosotros vivimos, 2 años después volvimos para conocer nuevas zonas del país y la experiencia, como ya contaré, también fue excepcional, pero sin duda la Patagonia deja huella en quien la visita, la humanidad que se siente al navegar junto a la ballena franca austral, el perderse por el fin del mundo, el abrumador silencio helado del Perito Moreno, la naturaleza salvaje de Iguazú, el calor de las gentes de Tandil, la locura nostálgica de Buenos Aires… es sin duda un viaje que, con alguna modificación aprendida de nuestro segundo viaje a Argentina, no sólo deseo sino que pienso repetir, seguro algún día con la persona que mueve mi mundo cuando estoy en casa, y si hay más compañeros de viaje bienvenidos serán.

Realmente a día de hoy no cambiaría nada de lo que vivimos, tuvimos un viaje increíble con sus fallos, sus

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Argentina 2009 Buenos Aires: nostálgica locura

Cansados, maravillados y sudados nos despedimos de Puerto Iguazú para conocer por fin Buenos Aires, esa megalópolis cargada de prisas y nostalgia a partes iguales que va a cerrar nuestro periplo por tierras argentinas.

Para esta última etapa hemos decidido reservar 4 noches en habitaciones dobles en el República Wellness, un hotel de 4 estrellas situado en plena avenida 9 de julio justo en frente del obelisco. Pagamos unos 35 euros por persona con desayuno buffet incluido y el hotel realmente merece la pena, por situación, por trato, porque tiene spa y porque después de tanto albergue nos merecemos darnos un pequeño lujo, y donde mejor que en la capital.

El obelisco desde el hotel
Para tres personas tan poco urbanitas como nosotros, encontrarnos con la locura que supone una ciudad de 15 millones de habitantes y no morir estresados es todo un reto.

Una vez aseados en el hotel y mentalizados con lo que nos podamos encontrar nos damos un primer paseo por el microcentro. Ciertamente la primera impresión al salir a la 9 de julio y comenzar a caminar es la de que la propia ciudad te engulle, la de que todo el mundo anda con prisas y que el ritmo de los porteños es infernal, pero nada más lejos de la realidad. Una vez que uno se deja llevar por avenida corrientes y se mete de lleno en el circo de puestos callejeros de la calle florida, poco a poco comienza a sentirse parte de esa marabunta que va de un lado a otro sin tener muy claro su destino.

La calle florida es un lugar en el que se puede encontrar casi cualquier cosa que uno quiera comprar como

martes, 4 de septiembre de 2012

Argentina 2009 Iguazú: maravilla natural

Tras decir adiós definitivamente a Tandil, nos preparamos para un destino que prevemos espectacular, aunque sin hacernos una idea real de cuánto puede llegar a serlo, 5 horas de autobús y un par de horas de avión nos separan de Puerto Iguazú, penúltima parada antes de cerrar viaje en la capital federal.

Los viajes en bus y avión se suceden sin grandes novedades, los buses siguen siendo igual de cómodos y la comida de los aviones igual de horrible, y para las 11 de la mañana estamos tomando tierra en el verdísimo aeropuerto de Puerto Iguazú.

Para dirigirnos a nuestro hostel en esta ocasión optamos por un taxi, en el camino nos sorprende el rojo de la tierra y las nubes de mariposas que atravesamos pero, sobre todo, la selva subtropical que, tras tantos días de desértica Patagonia, nos recibe con sus sonidos y colores.

Hostel Inn Iguazu
Hemos reservado habitación privada en el Hostel Inn Iguazú para 2 noches a 18 euros la noche con desayuno incluido. La primera impresión que tenemos al llegar es la de estar alucinando, el hostel Inn se encuentra en las afueras de Puerto Iguazú y parece más un resort que un albergue, al llegar te recibe una enorme piscina, con una caseta de paja en la que sirven caipirinhas y daikiris al son de la música reggae entre palmeras. Una vez realizamos el check inn vemos que la habitación también está muy bien, con baño privado y televisión, además en la entrada tienen punto de información turística para contratar excursiones, billar, ping pong, numerosos ordenadores con conexión a Internet, acabamos de llegar y ya nos da pena no haber reservado un par de noches más. Los puntos negativos, no está en la ciudad de Puerto Iguazú, por lo que hay que acceder a ella en taxi o hacer vida en el hostel, y, por las noches, hay fiesta hasta bastante tarde, por lo que si tienes una habitación en la planta de arriba, olvídate de descansar hasta la 1 o las 2 de la mañana.