Santuario de Urkiola |
De entre la múltiples opciones que existen en Bizkaia para realizar excursiones, visitar el Parque Natural de Urkiola es sin duda una de las más apetecibles. Planeando una mañana de monte sin extremada dificultad, y en nuestro caso con perro, optamos por subir al Urkiolagirre, apacible cumbre de la sierra de Anboto situada a 1011 msnm, tomando como punto de partida el santuario de Urkiola.
El santuario de los Santos Antonios Abad y de Padua de Urkiola es un templo católico que se ubica en el collado y puerto de Urkiola, en el municipio de Abadiño y es uno de los santuarios más venerados de la provincia y de los más antiguos. Junto a él disponemos de bastantes plazas de aparcamiento por lo que es un buen lugar para comenzar una mañana de excursión.
Tximistarri |
Nada más llegar, en el exterior del santuario, se encuentra una roca denominada Tximistarri (el meteorito), del que dice la tradición que si se da tres vueltas alrededor mientras se reza a san Antonio se encuentra pareja.
El santuario se erigió en el siglo XX sobre el lugar que ocupaba la antigua iglesia del siglo XVII, construida a su vez sobre una ermita del siglo VIII. Es de admirar su campanario, y ya en el interior, aunque resulta mucho más pequeño de lo que parece desde fuera, se pueden observar sus imágenes vidrieras y mosaicos; en nuestro caso, cuando acudimos se estaba celebrando misa, por lo que
tampoco pudimos admirar con detalle el interior.
tampoco pudimos admirar con detalle el interior.
Buitres |
Anboto desde Urkiolagirre |
Según nos vamos acercando a la cima podemos volver a observar caballos y el vuelo de buitres y pequeñas águilas. Ya en la cima, se encuentra el buzón que la señala y una mesa de orientación que nos señala las cumbres cercanas.
Las vistas desde esta pequeña cumbre son espectaculares, con el Anboto irguiéndose imponente frente a nosotros y una vista privilegiada de todas las peñas de Durangaldea.
Tras un reponedor descanso y algunas fotografías, comenzamos el descenso, que lleva poco más de media hora y, tras comprar queso Idiazabal en los puestos que hay en la entrada del santuario (merece la pena, buen precio y directamente de los productores), damos por cerrada la excursión.
Hay que señalar que existe la opción de realizar la ruta por las campas de Asuntza y las fuentes ferruginosas de Pol Pol, que lleva una hora y media y que está bien señalizada.
Hay que señalar que existe la opción de realizar la ruta por las campas de Asuntza y las fuentes ferruginosas de Pol Pol, que lleva una hora y media y que está bien señalizada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario